La propuesta presentada a concurso busca una solución que permita generar espacios a través de la combinación de un pieza de mobiliario.  Pretende poder modificar la percepción de un espacio, “activarlo”, alterarlo, pretende generar sensaciones en él ( tranquilidad, alegría…), basándose en el trabajo con conceptos relativos al color, la luz, la agrupación, la adaptabilidad, la escala o el equilibrio.   Debe ser una pieza capaz, tanto de poder funcionar de forma aislada, como de poder agruparse y no solo como una repetición de piezas iguales, sino que pueda cambiar de escala (una pieza de mayores o menores dimensiones a otra de referencia).

Parece claro que una de las formas de provocar sensaciones en el ser humano es mediante el uso del color y la luz de tal manera que un espacio neutro pueda modificarse al entrar en juego este objeto. Ante todo ello, la pieza propuesta se configura como una pirámide truncada invertida hueca de madera de cerezo, cerrada en la parte inferior con unas piezas de acero inoxidable y en la parte superior por un vidrio con lámina plástica translúcida de color.  su superficie interior está tratada con una capa de pintura fosforescente color amarillo muy claro.  Este tratamiento  permite que la pieza funcione como un foco de luz tenue que queda coloreada al atravesar la lámina de vidrio de la parte superior.   Este aspecto, unido a su claridad y sencillez volumétrica, contribuye a modificar, “activar”, alterar la percepción de un espacio, tal y como se  exponía en los objetivos iniciales.

La mesa gen así definida, permite combinarse y dar solución a espacios, tanto de viviendas, como de espacios públicos relacionados con la hostelería definidos por una tenue iluminación (espacios de copas…), funcionando en ambos casos, como una mesa auxiliar. Sin duda, al aspecto más comprometido desde el punto de vista técnico, el el relacionado con el equilibrio y la estabilidad de la pieza.  la pirámide invertida supone que, debido a la poca superficie de apoyo, la mayor parte de su volumen funcione en voladizo inestable, de tal manera  que,  ante  un  peso   situado   en   el perímetro superior, el objeto tiende a volcar.  para solucionar este aspecto, es necesaria la existencia de un contrapeso que evite dicha inestabilidad. La base de acero inoxidable que se propone, tiene, sumado al resto de las partes del objeto, suficiente peso para cumplir este cometido.